Sin duda alguna, una de las leyendas más famosas de Salamanca. Todo viajero que se precie, ha de buscar y encontrar la famosa rana esculpida sobre un cráneo labrado en la plateresca fachada de la Universidad de Salamanca. La dificultad de encontrarla es debido a la rica ornamentación que tiene toda la fachada, cargada de símbolos, motivos vegetales, animales y muchos personajes relacionados con la Historia y La Biblia. Tras instantes de atención, podemos encontrarla sobre un cráneo situado en la parte derecha de la fachada.
De todas las leyendas la más conocida es la que asegura que el estudiante universitario que veía la rana aprobaba sus estudios y se casaba. Si ya este estaba casado, podía pedir un deseo y este se cumplía. La versión menos creíble es la que la rana podría ser la firma del autor que labró las calaveras ya que los canteros solían dejar sus nombres en los bloques de piedra en forma de símbolos o figuras.
Otra leyenda nos habla del posible mensaje didáctico que pueda encerrar, ya que la rana es el símbolo del pecado de la lujuria, en un tiempo en el que era necesario evitar el peligro de las enfermedades contagiosas. Al estar situada sobre un cráneo, la rana nos recuerda la necesidad de la castidad para evitar el pecado y el contagio, ya que, en caso contrario, nos puede llevar a la muerte. Independientemente de la leyenda, lo cierto es que la rana se ha convertido en el símbolo de la ciudad.
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