MUSEO VIRTUAL – PASAJERO 56
DESAYUNO EN LA HIERBA. Edouard Manet. Museo de Orsay. París
El pintor francés, Eduard Manet, está considerado como uno de los principales ejemplos del impresionismo aunque nunca fuese un Impresionista en el sentido estricto de la palabra, a pesar de que, como vemos en “Desayuno en la hierba”, su estilo es más realista que impresionista. Curisamente, este cuadro causó un gran escándalo entre al moral de la epoca porque en él aoarecía una señora desnuda disfrutando relajadamente junto a dos hombres, estos vestidos. Y era un escándalo porque en este tipo de escenas, solía pintarse el desnudo femenino personificando a alguna diosa o ninfa o como una alegoría de la lujuría. Aquí, sin embargo, se trata de una mujer mortal, de carne y hueso que, además, mira al espectador con determinación. Las dos mujeres que aparecen en el cuadro son su profesora de piano y futura esposa, Suzanne Leenhoff, y una de sus modelos favoritas, Victorine Eureut.
El Almuerzo en la Hierba consiste, pues, en un almuerzo en el bosque, cerca de Argenteuil, con el Siena en el fondo. Los dos hombres, como decimos, van vestidos de forma elegante, casi impropia en un acto campestre. Los dos hombres son el hermano de Manet, Gustave y su futuro cuñado, el escultor holandés Ferdinand Leenhoff. Los dos personajes no están conversando entre ellos, mientras la mujer mira hacia el espectador, en una escena nada impúdica. En primer plano, a la izquierda del cuadro, están las ropas de la mujer, una cesta de frutas, y un pan redondo, figurando un bodegón. En el fondo, vemos a otra mujer, esta vestida, bañándose en el agua. Para satisfacer su curiosidad, les dire que la mujer vestida es Suzanne y la desnuda, Victorine.
Además, se pueden apreciar, no sin dificultad, dos animales: un pájaro y una rana. El pájaro siempre ha simbolizado en la pintura la pureza, el espíritu santo. En el cuadro se encuentra sobre la mujer vestida; mientras que la rana, por el contrario representa la lujuria y se encuentra junto a la mujer desnuda.
El cuadro fue presentado al salón de 1863, siendo rechazado precisamente porque el desnudo no estaba dentro de una iconografía mitológica, sino que mostraba una escena de la época celebrando un picnic. Luego, el tiempo le ha convertido en un icono del arte impresionista francés. Manet pudo haber inspirado en un cuadro similar, expuesto en el Museo del Louvre, llamado “Concierto campestre”, atribuido a Tiziano, el cual vemos a continuación.
Este “Concierto campestre” fue atribuido a Giorgione, pero posteriormente se consideró a Tiziano como su autor. Edouard Manet, en sus visitas al Louvre, quedó fascinado por este cuadro y en él pudo inspirarse en “Desayuno campestre”.
En este cuadro también se aprecian dos hombres jóvenes sentados en la hierba, mientras que cerca de ellos una mujer de pie, frente al espectador, vierte agua con una jarra en una especie de fuente de piedra, mientras otra mujer observa a los dos hombres. Las dos mujeres están completamente desnudas, mientras que los dos hombres, que hablan entre sí, están vestidos con trajes de época. Uno de ellos tiene un instrumento musical. En el fondo se ve un pastor y un paisaje campestre entre escenas de vegetación. El cuadro representa una alegoría de la poesía y la música, en el que las dos mujeres parecen ser la imaginación y la inspiración de los jóvenes. La mujer con la jarra de cristal sería la musa de la poesía trágica, mientras que la de la flauta representaría a la musa de la poesía pastoral. En cuanto a los dos jóvenes, uno bien vestido tocando el laúd, sería el músico, mientras que el que el otro sería el poeta. El pastor de la derecha representaría a la clase baja e inculta. La luz dorada del atardecer crea una atmósfera onírica.
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