Comillas

La villa cántabra de Comillas posee hasta tres plazas situadas juntas. En en esta ocasión visitaremos la plaza Corro de Campíos. En el siglo XIX los corros se ubican en la plaza del pueblo, muy cerca de la iglesia, cuya campana marcaba el final de la misa y el comienzo del juego de los bolos. Porque el corro era el lugar donde se jugaba a los bolos y se celebraban las fiestas. Porque Comillas está dividida en tres partes. La urbana, alrededor de esta plaza y la de la Constitución, donde se encuentra el Ayuntamiento viejo; la marinera, junto a la hermosa playa y alrededor del puerto pesquero; y la situada junto al Palacio de Sobrellano, junto al cual se extiende una hermosa pradera, lugar de ocio de los lugareños.

Campios es uno de los barrios más típicos de Comillas; encaramado en una de las zonas altas de la villa, a través de sus calles irregulares desemboca en el Corro de Campios, donde se realizaba el paseo, los bailes domingueros y donde se practicaba el juego de los bolos.

El Rey Alfonso XIII veraneó precisamente en el Palacio de Sobrellano y era muy aficionado a los bolos en este corro. También en este lugar se celebran las fiestas del Santo Cristo del Amparo el 16 de Julio. Y en este lugar los lugareños y visitantes lo utilizan como lugar de encuentro y de ocio, especialmente al atardecer.

En la plaza sobresale la recia iglesia de San Cristóbal, la cual fue construida en 1648 por los propios habitantes de la villa, siendo ellos mismos los que sufragaron las obras. Dedicaban a ello un día a la semana. La iglesia, sin embargo, tiene su entra por la plaza de la Constitución, anexa a esta plaza. Exteriormente, sobresale por su imponente torre prismática de cuatro alturas y acabada en un pináculo piramidal. Realizada en piedra de mampostería con sillería en los contrafuertes, acoge en su interior el Cristo del Amparo, patrono de los pescadores.